La demanda de puertas ha disminuido un 70% desde el 2007


Los empresarios buscan alternativas para paliar la situación, como realizar nuevas inversiones en I+D+i, una mejor relación calidad/precio, abrirse fronteras al mercado exterior a través de planes de marketing internacionales o bien adaptarse a las circunstancias nacionales y apostar por la rehabilitación.

La puerta ha sido un elemento que ha permanecido a lo largo de la historia de la arquitectura en todas las culturas y civilizaciones tanto exterior como interior y que en la actualidad, más allá de su funcionalidad, se convierte en un elemento que  forma parte de la decoración del hogar ofreciendo diferentes sensaciones y abriéndose paso a innovadores diseños.
No obstante, en España,  la demanda de puertas ha disminuido un 70% desde el 2007 con la consiguiente pérdida de cientos de empleos. Ante tal panorama, los empresarios buscan alternativas para paliar la situación, como  realizar nuevas inversiones en I + D + i,  una mejor relación calidad/precio, abrirse fronteras al mercado exterior a través de planes de marketing internacionales o bien adaptarse a las circunstancias nacionales y apostar por la rehabilitación.
Sin embargo, esta última se ha mantenido constante desde que comenzó la crisis, y para las puertas la demanda sigue siendo minoritaria, así que otros empresarios apuestan por la diferenciación de sus  diseños, mejora en la calidad y búsqueda de un cliente más exigente. Para Jorge Granada, Gerente de Eurodoor, empresa miembro de la Asociación Nacional de Fabricantes de Puertas de Madera (ANFPM)  la crisis es positiva porque “da tiempo para reciclar, formar de nuevo la plantilla y agudizar la mente para optimizar líneas de producción”.
Para aquellos que disponen  de los medios económicos adecuados,  la apertura hacia el mercado exterior, se convierte en el camino más innovador.
La solvencia para enfrentarse a nuevos retos parte de un buen plan estratégico y logístico, se ha de estar muy preparado para poder adaptarse a las exigencias de cada país así como ser muy competitivos y ofrecer la mejor calidad. Así, muchas empresas han establecido sistemas de certificación  promoviendo no solo la calidad sino también su respeto por el medio ambiente.
Para otras empresas, la salida se centra en abaratar costes, disminuir en parte la calidad, a mejores precios, lamentablemente, la mayor parte de los clientes  prefiere esta relación no siendo conscientes de que las puertas de buena calidad  son funcionales a más de 20 años.