TECNIFUSTA diversifica su actividad


Consumado el cambio generacional en la prestigiosa empresa de L’Escala (Girona), Jordi Figueras sucede a su padre Lluis al frente de TECNIFUSTA; especialista en la ingeniería y montaje de estructuras de madera, mientras que su hermano Marc ha puesto en marcha un negocio de aprovechamiento de biomasa en el bosque, cuyo nombre es LIGNIA.

Preparada técnicamente para resolver cualquier requerimiento con madera estructural, TECNIFUSTA viene realizando obras diversas, principalmente en Cataluña; en cuanto a tamaño, complejidad, uso y clientela. Desde cubiertas para grandes luces, a techos móviles, puentes y pasarelas, módulos de madera, pérgolas con su carpintería complementaria… y también reparaciones de cubiertas antiguas o dañadas.
Implicada y comprometida con la construcción con madera, TECNIFUSTA es miembro de la Asociación Española de Fabricantes de Madera Laminada (AFML), integrada en FEIM, y trabaja día a día muy ligada a la Associaciò de la Fusta Estructural (AFE) y el Institut Català de la Fusta (INCAFUST). Ahora, la empresa de L’Escala ahonda en su vocación formativa, teórica y técnica, y ha organizado, en colaboración con la Fundació Universitat de Girona, el curso de postgrado “Anàlisi i Càlcul Estructural en Fusta”.
“La madera está en un buen momento –afirma convencido Jordi Figueras-. Ojalá las empresas que seguimos activas no lo estropeemos compitiendo por precio y recortando la calidad, porque sólo conseguiríamos que, una vez más, durante un largo tiempo, la gente no quisiera ni oír hablar de la madera”.
Según el gerente de TECNIFUSTA, sus clientes están dispuestos a pagar un plus por la madera, cuando ante un proyecto se hace una comparativa de costes y prestaciones con otros materiales alternativos.
“La madera ya está puesta en el mapa –asevera Lluis Figueras, fundador de la empresa gerundense-. Ahora nos toca mantener su prestigio y mejorar su cuota en el mercado”.
Con poca actividad y unos márgenes muy ajustados, en TECNIFUSTA preocupa, más que la crisis, las consecuencias de la crisis… “Malvender y hacer chapuzas podría condenar al sector a una nueva travesía del desierto -concluye Jordi Figueras-. Por el contrario, si seguimos haciendo las cosas bien, los técnicos exigen calidad y se racionalizan el trabajo y el mercado, tendremos un futuro y un camino de progreso”.


Explotación forestal


Marc Figueras, hermano de Jordi e hijo de Lluis, ha reorientado su futuro hacia el sector forestal. Con su proyecto LIGNIA se propone explotar biomasa en los bosques del entorno próximo a Girona.
La empresa arrancó el pasado mes de Mayo. Por una parte, extrae de los montes biomasa industrial que es exportada a Italia, desde el puerto de Palamós, donde este material encuentra vías de comercialización. “Aquí no disponemos todavía de centrales que procesen esa biomasa y vendan su agua caliente sobrante, y a las que pudiésemos venderla a título individual o formando cooperativas –explica Marc Figueras-. Una iniciativa así potenciaría y daría más valor al aprovechamiento forestal”.
El tronco no recto es destinado a la fabricación de papel, y viaja a Francia. El tronco recto de diámetro normal, en largos de dos metros y medio, queda en Cataluña, destinado a la fabricación de palets y embalaje industrial.
Aproximadamente un 60% de la explotación de LIGNIA se va a embalaje. Del 40% restante, un 25% es para biomasa industrial y un 15% para la producción de papel, atendiendo siempre al volumen de facturación.
Con esta iniciativa, TECNIFUSTA diversifica su negocio y entra también en la primera transformación de la madera. “Lo más complicado en esta actividad es hallar superficies forestales rentables –concluye Marc Figueras-. Este día llegará cuando se puedan mecanizar al cien por cien y se introduzca en los bosques carriles para la circulación de vehículos, con normalidad”.
La ilusión del menor de los Figueras es extraer de los montes biomasa comercial de calidad, para comercializarla en granjas, hoteles, ayuntamientos… donde se aguarda un boom de instalación de calderas. “Sería deseable que esto sucediera de forma gradual y ordenada. Incluso que fuesen primadas las primeras unidades en los años venideros –termina el gerente de LIGNIA-. Pero seguramente todo se hará deprisa y en apenas dos años, antes que llegue la fecha marcada por la Unión Europea para cumplir su reglamento 2020”.